La enfermedad periodontal, la persistencia de dientes de leche, las fracturas dentales y los tumores orales son las enfermedades de la cavidad oral más frecuentes en la especie canina. En la primera parte de este artículo se describe la enfermedad periodontal y la persistencia de los dientes de leche. A continuación, se hace una revisión de las fracturas dentales y los tumores orales.
Fractura dental
La fractura dental es muy común en perros que tienen la costumbre de jugar con objetos duros, como palos o piedras, siendo los dientes caninos los más afectados (figura 6). La fractura dental es bastante dolorosa y es fácilmente detectada por los dueños porque muchos perros chillan de dolor, notan sangrado dental o un cambio drástico en el comportamiento.
El diagnóstico consiste en evaluar la viabilidad de la pieza para que el tratamiento sea conservador con endodoncia (figura 7), o radical con la extracción del diente (figura 8).
Tumores orales
La esperanza de vida de nuestras mascotas aumenta de acuerdo con los cuidados por parte de los propietarios, la alimentación y los cuidados veterinarios en medicina preventiva. Esto conlleva más años de vida y también la aparición de tumores que no eran tan frecuentes en el pasado. Los tumores orales representan cerca de un 6 % de los tumores en los perros. La mayoría de los tumores orales son malignos y los más frecuentes son los melanomas, fibrosarcomas (figura 9) y carcinomas. Los tumores benignos más frecuentes son los fibromas (épulis) y papilomas. Los signos clínicos más comunes son mal aliento, pérdida de peso, sangrado bucal, disfagia y pérdida de dientes. El diagnóstico se basa en los signos clínicos, localización del tumor y estructuras afectadas. El diagnóstico definitivo se obtiene mediante histología. Los tratamientos disponibles son resección quirúrgica, quimioterapia y radioterapia.
Los papilomas orales son nódulos de carácter benigno en la cavidad oral producidos por una enfermedad infectocontagiosa vírica de la especie canina (figura 10). También se puede encontrar en piel, mucosa ocular y genitales de manera menos frecuente. Afectan, sobre todo, a perros jóvenes. El aspecto macroscópico es parecido a una “coliflor”. La remisión es espontánea, pero en algunos casos requieren tratamiento mediante cirugía, electrocirugía, crioterapia o autovacuna.
Extraído de Paulo Chen, Enfermedades orales más frecuentes en perros. Ateuves 93, págs. 12-15.